Marta Vázquez / La Voz, 14 de diciembre de 2015.
La empresa ourensana Gaélica Solar acaba de sacar al mercado un sistema autónomo que imita la luz natural y permite que las plantas de interior se mantengan vivas y crezcan. El novedoso sistema consta de una lámpara LED que se nutre de energía solar y emite las diferentes gamas cromáticas que los vegetales necesitan para subsistir.
«Es habitual que las plantas que tenemos en casa desde el verano no sobrevivan al invierno aunque les dejemos un sistema de riego», explica Manuel Eirín, gerente de Eólica Solar, quien afirma que el sistema que han ideado en su empresa viene a paliar la falta de calor y la escasa radiación solar que suelen paralizar de forma definitiva el metabolismo y causan la muerte de las plantas. «Este sistema no tiene coste energético alguno y permitirá que perduren durante muchos inviernos», asegura.
Afirma el empresario que el producto se diseñó en las instalaciones que la firma tiene en el Parque Tecnológico de Galicia, en Ourense, si bien la idea se gestó a muchos kilómetros. Fue, de hecho, tras recoger una demanda que había surgido en su filial mexicana. «Allí, por motivos de seguridad, para evitar robos, hay muchos negocios que se instalan en sótanos y casi siempre tienen que recurrir a plantas artificiales porque las naturales no sobreviven, por eso se nos ocurrió idear este sistema», apunta Eirín, que asegura que el producto facilita el crecimiento de la flor «de la misma forma que si estuviese al lado de una ventana».
Consumo nulo
La electricidad generada a partir de un panel solar que se coloca en el exterior del edificio, asegura Eirín que con un inapreciable impacto visual, es la fuente de energía de la que se nutre la lámpara LED, por lo que el consumo energético del aparato es nulo. Además, el sistema cuenta con otra peculiaridad, y es que emite tres tipos de luces: azul, amarilla y magenta. «Desestimamos la inclusión de otras gamas, como la ultravioleta, porque a pesar de que son beneficiosas para el crecimiento o la eliminación de insectos portadores de agua, pueden ser nocivas para las personas», advierte Eirín. Asegura que la luz azul favorece el crecimiento, la roja es buena para la floración y la magenta facilita el desarrollo precoz de la planta.
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