COLPISA 30 de septiembre de 2013
La muerte y sus ritos forman parte del imaginario cultural de cada una de las sociedades. Desde la icónica Santa Muerte mexicana pasando por las clásicas Parcas controlando el fino hilo de la vida. Ahora el paso al otro mundo se adapta a la tradición valenciana con la apuesta de una empresa local que propone convertir las cenizas de una persona fallecida en una carcasa con la que encender la última mecha. El objetivo es crear un explosivo que se dispare al cielo en una despedida que «aúna la tradición de la pólvora y la última voluntad», un disparo llevado «hasta sus últimas consecuencias», tal y cómo afirman desde la empresa.
En el núcleo de la carcasa se encuentran los restos del finado embolsados, que se rodean de una esfera con una carga explosiva que acabará explotando en el aire, un estruendo que supondrá un homenaje póstumo en el que la el ruido será el protagonista. Pero no todo es tradición en este último adiós fallero, la inclusión de las últimas tecnologías y el poder de Internet también tienen su lugar en este funeral. El petardo va acompañado de un código QR que actúa de enlace mediante el que, a través de un dispositivo móvil, permite la correcta identificación del difunto, remitiendo a una página web en la que aparecen sus datos personales y biográficos. La ceremonia ha sido desarrollada por la funeraria online www.lápidasparanichos.com en colaboración con Europlà, empresa encargada de la pirotecnia y con una experiencia en fuegos artificales que se remonta a 1977. Las empresas se localizan en las localidades de Onteniente y Bèlgida, respectivamente.