Marta Gómez / LA VOZ, 14/10/2016 05:00
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| CARMELA QUEIJEIRO |
La bata de la firma Goa, el origen de Zara, que figura en la exposición Galicia Cen que se exhibe en Afundación de A Coruña, recordó a un comerciante del municipio coruñés de Boiro que en la paquetería que ahora regenta junto a su hermana -y que abrió su madre en 1956- comercializaron las prendas confeccionadas por Amancio Ortega. Así que se dirigió al almacén de la tienda en su búsqueda y allí estaban: dos batas que dan cuenta de que el germen de Inditex también tuvo su etapa psicodélica.
Juan Cabrera trabaja en la paquetería Josefina desde que, siendo un chaval, empezó a ayudar a su madre y, aunque no es capaz de fijar con exactitud la fecha en la que las dos coloridas batas que muestra entraron en el negocio, indica que fue por los años sesenta. La prenda no era de las más baratas que podían encontrarse: «Estas batas tiñan fama de boas, a xente queríaas pola boa calidade e fixéronse pronto co mercado. Tamén tiñan un deseño moderno».
Lo cierto es que las piezas, que casan a la perfección con el lookvintage más logrado, tienen su aquel: son entalladas, ligeras, tienen un cinturón a modo de adorno en la espalda... «Xa daquela tiña bos deseñadores Amancio Ortega, vese que a moda lle interesaba e xa imprimía aos seus produtos un algo máis que o resto dos fabricantes», remarca Cabrera, que señala que, en un campo aparentemente muy reducido como el de las batas de casa, el dueño del imperio Inditex supo abrir nuevos caminos: «Ademais de apostar pola calidade e mellorar os deseños, tamén innovaron con tecidos coma o poliéster».
Esas batas guateadas marcaron a más de una generación y, si hay algún nostálgico, debe saber que en Boiro están dispuestos a venderle una. Eso sí, no le ponen precio.
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