Hawking presenta una mininave que podría llegar en 20 años al sistema Alfa Centauri

«La vida en la Tierra se enfrenta a grandes peligros. No es prudente mantener todos los huevos en la misma cesta», recuerda el científico

R. R. / la voz, 13 de abril de 2016.

JEMAL COUNTESS | AFP

Un microchip del tamaño de un sello unido a una vela e impulsado desde la Tierra por decenas de láseres que enfocarán su luz en un punto concreto. Este es el concepto de la nave StarChip, que podría alcanzar el sistema solar Alfa Centauri, situado a 40 billones de kilómetros de la Tierra, en poco más de veinte años, a una velocidad que equivale al 20 % de la de la luz, mil veces más rápida que cualquier otra que existe en la actualidad.

Una idea como esta puede parecer descabellada, pero el proyecto Starshot, impulsado por el millonario ruso Yuri Milner, está apoyado por Stephen Hawking y cuenta con la colaboración de Peter Worden, exdirector del Centro Investigación Ames de la NASA. Milner, que tomó su nombre del astronauta Yuri Gagarin y que lanzó ayer la iniciativa para hacerla coincidir con el 55 aniversario de su primer vuelo humano al espacio, aportará 88 millones de euros para investigar las posibles tecnologías que conviertan este desafío en una realidad.

El ruso, que ha involucrado en la aventura a Mark Zuckerberg, el creador de Facebook, tampoco es un advenedizo en estas lides. Es uno de los mayores filántropos de la ciencia mundial y recientemente también ha invertido otros 88 millones en un proyecto para buscar vida extraterrestre en el universo, el objetivo también de la nueva misión. «La vida en la Tierra se enfrenta a grandes peligros. No es prudente mantener todos los huevos en la misma cesta», recordó Hawking.