M. V. /la voz, 29 de noviembre de 2015.
Si funciona la aplicación, se habrá acabado el estar minutos esperando a que las dependientas localicen esa talla que le falta o esa prenda que ha decidido probarse en el último momento. Inditex está ensayando la instalación de iPad en los probadores de tiendas de Zara para que las peticiones de los clientes se tramiten lo más rápido posible.
El sistema, pionero en el sector, es fácil de manejar. Antes de entrar en el probador, las prendas seleccionadas son pasadas por un escáner y reconocidas inmediatamente por la tableta del vestidor indicado. A partir de ahí, solo hay que seleccionar el artículo en el dispositivo, de la misma manera que se hace cuando se compra a través de la web, y, posteriormente, la talla. El servicio también propone posibles combinaciones de la prenda elegida con otras para que el cliente vea el resultado por si quiere probárselas. En una siguiente pantalla aparece el resumen de todas las solicitudes, e incluso la posibilidad de acceder al servicio de personal shopper (atención individualizada de una dependienta). Unos minutos después, uno de los empleados de la tienda las acercará hasta el probador.
La intención de la empresa gallega es testar el funcionamiento de este servicio -ocurrirá en unos días- en una de las tiendas con más movimiento de España, para, posteriormente, evaluar los resultados y decidir si finalmente lo implanta a nivel global. Inditex ha evitado dar más datos.
Un servicio similar ya está en marcha para el personal de algunas tiendas del buque insignia de Inditex. Desde hace un tiempo, los trabajadores disponen en sus dispositivos electrónicos de un sistema parecido con el que pueden solicitar prendas sin necesidad de ponerse en contacto por teléfono con sus compañeros del almacén.
Sin duda, se trata de una apuesta más por acercar las nuevas tecnologías a los clientes y que se puedan beneficiar de sus ventajas. En la misma línea, hace tiempo se instalaron pantallas táctiles gigantes en las tiendas, entre ellas las de Pull&Bear o Bershka, para que los compradores puedan comprobar la disponibilidad de las prendas en el establecimiento. Otra prueba de que el grupo está interesado en facilitar las compras es la instalación, a principios de este año, de una caja autoservicio en el Zara de Marineda, en A Coruña, para que los clientes no tuvieran que hacer cola. En este caso también se trataba de una iniciativa piloto, aunque por el momento este sistema no se ha ampliado a otras tiendas.
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