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viernes, 20 de noviembre de 2015

Seguridad vial «made in Sanxenxo»

Una empresa sanxenxina prueba en el paseo marítimo de Silgar un novedoso semáforo y rotonda luminosos para facilitar la circulación con poca luz
Marcos Gago / la voz, 20 de noviembre de 2015.
Capotillo / El semáforo y paso de peatones está en el paseo
de Silgar antes del cruce con Luis Rocafort.
La playa de Silgar, con picos de más de 7.500 bañistas en algunos días del pasado agosto, recibe por sí sola más personas que la población de bastantes municipios gallegos. El paseo marítimo que la circunda es utilizado cada día del verano por una cifra de usuarios muchísimo más amplia. Sanxenxo, la tercera ciudad de Galicia en temporada estival, es un lugar idóneo para probar in situ nuevos sistemas de seguridad vial. Desde hace unos meses un sistema pionero de señalización de rotondas y un semáforo en uno de los cruces más transitados -Luis Rocafort- sirve como prueba de laboratorio de su viabilidad.
El proyecto tiene origen sanxenxino, lo impulsa la empresa STV y cuenta con la colaboración del Concello de Sanxenxo, que permitió la ubicación de estos sistemas en la vía pública. El portavoz de STV, José López, explicó que se trata de un proyecto de I+D. En el caso de la glorieta, «se trata de unas piezas especiales que, a medida que se hace de noche, se iluminan», detalla López. La rotonda queda perfectamente a la vista y funciona con una placa solar de polietileno. El producto, ya homologado y patentado, aspira a entrar en el mercado mundial y llevaría, de tener éxito, el nombre de Sanxenxo un paso más allá de su conocida fama como villa turística.
El paso de peatones en Silgar está instalado justo antes del cruce con Luis Rocafort. Consiste en unas piezas en el suelo, que también se iluminan según va oscureciendo y que permiten que los conductores estén alerta al ver brillar este tramo de calzada.
A su lado, además, se encuentra un poste, dotado con una pieza antivandálica para evitar cualquier destrozo, y que cumple la doble función de aviso y de semáforo. Alimentado también por una placa solar, este ingenio tiene un sensor que, cuando algún peatón se acerca al punto para poder cruzar, provoca que se encienda la luz roja en el poste que está junto a la acera. De esta forma, la luz de alerta advierte a los conductores de la obligación de respetar el tránsito de los viandantes. «El conductor del vehículo se percata de que va a pasar gente y permite que se anticipe», describe el promotor de esta iniciativa.
Este sistema tiene otra ventaja adicional. Cuando un coche circula por encima de las piezas luminosas colocadas en la calzada, «la banda no se percibe mucho en el paso de los vehículos por encima, pero la luz que avisa de que va a pasar la gente se ve muy bien», recalca. Este producto también está patentado y el portavoz de STV indica que el sistema se ha ido perfeccionando, sincronizando y mejorando desde el punto de vista técnico a lo largo de estos meses.
Es una apuesta por la modernidad cuyo diseño se ha llevado a cabo en Sanxenxo y cuya puesta a punto cuenta también con la colaboración de una empresa viguesa. Así que ya saben, en Silgar, se puede disfrutar de un novedoso método en seguridad vial, «made in Sanxenxo».

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