NOVO / VdG, 05 noviembre, 2015
Algo tan banal como una discusión de pareja originó el movimiento «Follow me to...» que ha dado la vuelta al mundo y se ha convertido en una moda viral en las redes sociales. El creador de esta tendencia es el fotógrafo ruso Murad Osmanny todo empezó hace cuatro años, durante un viaje del artista junto a su novia a Barcelona en octubre del año 2011.
Nataly Zakharova, pareja de Osmann, se quejó en un momento dado de que él estuviese pendiente todo el rato de sacar fotografías. La joven tomó la mano de Murad y él la fotografió, de espaldas, con sus manos entrelazadas y un rincón de la ciudad al fondo. Y ahí nació «Follow me to...»
Desde ese lejano día, hace ya cuatro años, nació un proyecto que tiene también una página de Facebook y que se ha convertido en tendencia. Muchos fotógrafos anónimos han «copiado» en todo el mundo la pose deMurad Osmann y su pareja.
El fotógrafo ruso ha seguido fotografiando en distintas partes del mundo a su pareja, que ya no es su novia sino su mujer y lleva su apellido -Nataly Osmann-.
La página en Instagram de Murad Osmann cuenta con tres millones y medio de seguidores. Su mujer tiene 789.000 fans.
La pareja ha viajado a incontables lugares del mundo. Estados Unidos, Japón, Abu Dhabi, Sri Lanka, Jordania e Islas Maldivas -donde pasaron su luna de miel en el mes de julio de este año-, entre otros muchos lugares.
La pareja viaja alrededor del mundo de la mano y hacen viajar a sus seguidores con ellos. Descubren rincones insólitos y de belleza asombrosa. Abajo, otra imagen de su viaje a Sri Lanka.
Miles personas han copiado su pose y en Galicia el fotógrafo gallego Farero parodió esta curiosa tendencia fotográfica. «Follow me to...» faro de Illa Pancha es el título de la imagen que critica las modas y el seguidismo en las redes sociales.
Algo tan banal como una discusión de pareja originó el movimiento «Follow me to...» que ha dado la vuelta al mundo y se ha convertido en una moda viral en las redes sociales. El creador de esta tendencia es el fotógrafo ruso Murad Osmanny todo empezó hace cuatro años, durante un viaje del artista junto a su novia a Barcelona en octubre del año 2011.
Nataly Zakharova, pareja de Osmann, se quejó en un momento dado de que él estuviese pendiente todo el rato de sacar fotografías. La joven tomó la mano de Murad y él la fotografió, de espaldas, con sus manos entrelazadas y un rincón de la ciudad al fondo. Y ahí nació «Follow me to...»
Desde ese lejano día, hace ya cuatro años, nació un proyecto que tiene también una página de Facebook y que se ha convertido en tendencia. Muchos fotógrafos anónimos han «copiado» en todo el mundo la pose deMurad Osmann y su pareja.
El fotógrafo ruso ha seguido fotografiando en distintas partes del mundo a su pareja, que ya no es su novia sino su mujer y lleva su apellido -Nataly Osmann-.
La página en Instagram de Murad Osmann cuenta con tres millones y medio de seguidores. Su mujer tiene 789.000 fans.
La pareja ha viajado a incontables lugares del mundo. Estados Unidos, Japón, Abu Dhabi, Sri Lanka, Jordania e Islas Maldivas -donde pasaron su luna de miel en el mes de julio de este año-, entre otros muchos lugares.
La pareja viaja alrededor del mundo de la mano y hacen viajar a sus seguidores con ellos. Descubren rincones insólitos y de belleza asombrosa. Abajo, otra imagen de su viaje a Sri Lanka.
Miles personas han copiado su pose y en Galicia el fotógrafo gallego Farero parodió esta curiosa tendencia fotográfica. «Follow me to...» faro de Illa Pancha es el título de la imagen que critica las modas y el seguidismo en las redes sociales.
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