María Santalla / LA VOZ, 09/11/2016
El huésped indeseado que representa la velutina se siente cada vez más cómodo en esa casa ajena que es Galicia para ella y va colonizando rápidamente nuevos espacios. Cada mapa que la Consellería do Medio Rural hace público con la presencia de nidos de esta especie hace patente su expansión imparable. El último recoge la situación tal como estaba el día 25 de octubre y demuestra que la avispa asiática se va adentrando cada vez más en las provincias de Lugo y Ourense tras haberse expandido por prácticamente la totalidad de las de A Coruña y Pontevedra.
Este último mapa revela que la velutina ha sido detectada este año en más de 200 concellos, lo que significa que dos de cada tres ayuntamientos gallegos están afectados por este insecto invasor. Su presencia a seis días de que finalizase el mes de octubre era ya mayor que la que se registraba cuando acabó el 2015. A lo largo del año pasado, efectivamente, se detectaron nidos de avispa asiática en unos 170 concellos y, aunque había colonizado prácticamente la totalidad de las provincias de Pontevedra y A Coruña y la franja más al norte de Lugo, su presencia en Ourense y en el resto de Lugo era prácticamente testimonial.
En cambio, en lo que va de año se han encontrado ya nidos de velutina en todos los ayuntamientos de la provincia de A Coruña excepto cuatro: Laxe, Fisterra, A Pobra y Mazaricos. En Pontevedra quedan también únicamente cuatro concellos -Agolada, Lalín, Rodeiro y Dozón- sin que a estas alturas del año se haya constatado la existencia de avispas de esta especie. Mientras, en Lugo ha ido avanzando desde la costa hacia el interior y ha colonizado ya buena parte de la mitad norte, hasta la capital de la provincia, y algunos de los ayuntamientos más al sur, en el límite con Ourense. En esta provincia, en cambio, la expansión se está produciendo de oeste a este y se ha detectado ya este insecto en una veintena de municipios.
Posiblemente de aquí a fin de año esa lista crezca aún más, puesto que los nidos se ven con mayor facilidad en otoño e invierno, cuando los árboles en los que se asientan pierden sus hojas. Mientras, las investigaciones buscan un método eficaz para combatir esta plaga que está provocando una importante mortalidad en las colonias de abejas y que para el hombre puede resultar peligrosa, igual que la avispa común, en caso de picaduras múltiples.
No hay comentarios:
Publicar un comentario