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viernes, 16 de octubre de 2015

El martillo de Thor existe

Un hombre crea una réplica de una de las armas más temidas en la mitología nórdica, el Mjolnir. Solamente él puede levantarlo
LA VOZ, 16 de octubre de 2015.

El de Thor, pongánse en contexto, es un martillo que solo su dueño, el dios nórdico del trueno hecho superhéroe por Marvel, puede levantar del suelo. Pero, ¿y si el armatoste cambiase de dueño? Vale, que ahí está la cuestión. En que nadie, excepto su amo, es capaz de empuñar y utilizar contra el enemigo. Pero hemos encontrado la excepción que confirma la regla. Un tipo, hacker por gusto, fanático de los cómics de Marvel y bromista de nacimiento, ha fabricado unaréplica del Mjolnir que solamente él puede blandir. 
No atrae relámpagos del cielo ni tampoco se lanza como un boomerang, pero el martillo de Thor de Allen Pan se planta cuando nota que alguna presencia extraña le sujeta del mango. Y solo se rinde cuando su creador se acerca para levantarlo. Para demostrar sus espontáneos superpoderes, el ingeniero retó a todo viandante que se cruzó en su camino a intentar levantar el martillo del suelo. Misión infructuosa para los que se prestaron a probar. Un vídeo, colgado en Youtube, recoge el momento en el que Pan, más encleque que fornido, se enfrenta a la legendaria herramienta y, sin ningún esfuerzo, lo eleva en el aire.
¿Dónde está el truco? Lo que hizo el también youtuber, dueño del canal Sufficiently Advanced, fue construir un clon del demoledor martillo con un circuito electromagnético en su interior a base de potentes electroimanes y un escáner de huellas digitales. En la cabeza del instrumento colocó uno de estos imanes, extraído de un microondas, que consigue generar una fuerte atracción magnética cuando se coloca sobre una superficie de metal, como puede ser -tal y como se aprecia en las imágenes- la tapa de una alcantarilla. En resumen, que se le «pega» el metal.
Cuando el martillo detecta la huella de su dueño, a través del lector dactilar, el sistema electromagnético se desactiva, «despegándose» del suelo.

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