E.V.Pita / la voz, 01 de febrero de 2015.
No hay trato entre la dueña del Sol y un gigante de Internet. La viguesa Ángeles Durán, que en el 2010 se proclamó propietaria del astro rey, acaba de rechazar un acuerdo extrajudicial con eBay, el mayor portal de subastas. La multinacional del comercio electrónico la tentó hace días para que retire la demanda que presentó porque la web de pujas le bloqueó su página desde la que vendía parcelas del Sol a un euro el metro cuadrado. Ella reclama 10.000 euros porque, según dice, varios clientes compraron parcelas estelares por 600 o 1.200 euros y se quedaron sin certificado porque ya no le dejan venderlas.
Su demanda fue admitida a trámite hace 2 meses y las partes celebrarán una vista previa el 26 de abril en el juzgado de primera instancia número 5 de Alcobendas, en Madrid.
En el 2012, Ángeles Durán entabló otro litigio contra la Sociedad General de Autores Española (SGAE) porque quería cobrar un canon cada vez que sonase en un móvil el tono del alarido de Tarzán, grito que ella registró como la partitura musical La Llamada. El juez del mercantil número 3 de Vigo desestimó su pretensión porque todos saben quién es el actor que inventó el grito de Tarzán en 1929.
El actual litigio deriva de los problemas que Durán tiene para comercializar su más preciada posesión: el Sol. En noviembre del 2010, fue a un notario de O Porriño y levantó la siguiente acta de manifestaciones: «Soy propietaria del Sol, estrella de tipo espectral G2, que se encuentra en el centro del sistema solar». Adquirió la propiedad por aprensión de sus rayos y por no conocerse dueño alguno en 5.000 millones de años.
En abril del 2013, Durán dio un paso más y reinventó la venta de solares. Lanzó esta oferta en el portal de subastas de eBay: «Vendo objeto nuevo, no usado, no abierto y no dañado. El envío es gratuito». Empezó a colocar parcelas del Sol desde un euro. Había 6 billones de kilómetros cuadrados para adjudicar, el 99,8 % de la masa del sistema solar. A cada cliente le envió por email un certificado que acreditaba su compra.
Durán argumentó que los frutos del Sol llegan a la Tierra en forma de rayos, que alimentan los paneles solares. El futuro negocio para los copropietarios de la estrella residirá en cobrar un canon por la energía generada. Pero eBay no compartió su luminosa idea y le bloqueó la página para impedir que se vendiese un artículo «que no se puede tocar». Ella niega que sea un timo pues «el objeto existe y es tangible». Recalca que cuando sacó las parcelas a la venta informó a eBay, que hubo clientes que se quedaron colgados tras el cierre y se queja de que el portal le cobró 101 euros de comisión y no 40 por ventas no realizadas «que no me permiten hacer». Así que demandó a la filial española, con sede en Alcobendas, y reclamó 10.000 euros por incumplimiento de contrato, y daños y perjuicios.
La demanda fue aceptada el pasado 20 de noviembre y el portal californiano le propuso un acuerdo extrajudicial para que desistiera. El trato es que ella renuncie a más acciones legales, que no reclame dinero a eBay ni a PayPal y que acepte que su controvertido artículo fue retirado porque contravino la política de la empresa. Le exige confidencialidad o la penalizará con 20.000 euros. Durán no aceptó el acuerdo: «Quieren que firme un contrato a ciegas, no dicen ni qué cantidad me darían». Sin pacto, habrá juicio.
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