Alfonso Andrade / LA VOZ 15/3/2011
La Stevia rebaudiana es una planta originaria de Paraguay y Brasil. Sus extractos, glicósidos de esteviol, son trescientas veces más dulces que el azúcar y, además, se eliminan por la orina sin ser asimilados por el organismo, de manera que no alteran los niveles de azúcar en la sangre. Por tanto, constituye una alternativa natural a los edulcorantes artificiales, especialmente en el caso de los diabéticos. Está demostrado también un beneficio para los hipertensos.
Sin embargo y a pesar de que supone desde los años setenta el 50% del consumo de endulzantes en países como Japón, en la UE no está aprobada como edulcorante, aunque sí para consumo animal y usos agrícolas.
Pero esta situación parece llegar a su fin con la luz verde de la Comisión Europea, que parece inminente. «Hace un mes emitió su última consideración, así que esperamos en breve una respuesta oficial y su posterior aprobación», sostiene Mónica Lorenzo, secretaria y cofundadora de la Asociación Europea de la Estevia (Eustas), una organización sin ánimo de lucro.
Explica Lorenzo que el larguísimo proceso de su aprobación como edulcorante se inició a mediados de los noventa y se vio ralentizada «por estudios encargados entonces por empresas de edulcorantes artificiales, mal documentados y que arrojaron resultados negativos sobre la planta».
«Esos estudios -prosigue- se rebatieron científicamente. En el 2005 aprobó su consumo la OMS y en el 2007 se realizó ante la UE una triple solicitud por parte de Cargill, la japonesa Morita y la propia Eustas, que la Comisión obligó a unificar».
Imperios económicos
Tras varios años de papeleo, los últimos obstáculos parecen casi resueltos. De la luz verde están pendientes poderosos imperios económicos que esperan con ansiedad el momento de comercializar en Europa postres lácteos y refrescos para diabéticos, entre otros productos. Socios de Eustas son, por ejemplo, Coca Cola, Heinz o Ricola, que respaldaron desde un primer momento la solicitud de autorización como edulcorante.
Con todo y a pesar de que la venta y el consumo en humanos no están autorizados por ahora, en Internet proliferan direcciones donde puede encontrarse el producto. También se comercializa la planta en sí, que numerosos consumidores ingieren bajo su responsabilidad.
Noa Vázquez, asesora dietética, licenciada en Biología y Ciencia y Tecnología de los Alimentos, y autora del blog Menú del Día en La Voz de Galicia, explica que «la estevia regula los niveles de azúcar sanguíneo. Se ha convertido en una planta esencial para la calidad de vida de los diabéticos, a la vez que contribuye a nivelar la presión arterial, es un potente diurético y facilita la absorción de grasas».
«Las investigaciones científicas demuestran claramente -prosigue Vázquez- que el consumo a largo plazo es seguro para las personas. Esta opinión contrasta con la irreductible presión de la industria de los edulcorantes para que en Estados Unidos, principal consumidor de edulcorantes del mundo, no pueda usarse como aditivo alimentario. Pero tanto la FAO como la OMS han tomado determinaciones para certificar la inocuidad de esta planta».
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