X. NOAL / LA VOZ 05 de marzo de 2012
Los propietarios del loro Yako, que habitualmente largaba sus parrafadas, llamaba a sus dueños por el nombre o incluso se atrevía a cantar la canción de Michel Teló Ai se eu che pego, se llevaron ayer por la tarde un gran disgusto al ver que el ave y su jaula habían desaparecido de la entrada del garaje de su casa en Abanqueiro.
No saben a ciencia cierta a qué hora un amigo de lo ajeno aprovechó para entrar en la propiedad delimitada por un muro y echó mano de la mascota, pero calculan que la acción se produjo sobre las cuatro de la tarde, cuando echaron en falta al ave. Acto seguido se pusieron en marcha con el fin de tratar de localizarla lo antes posible, puesto que Yako llevaba ya diez años con ellos y era uno más de la familia.
Con el fin de evitar que el autor o autores del hurto puedan vender el animal, han señalado que se trata de un loro gris de cola roja, de la especie yako. Además de estas características, su pico es de color negro.
Los propietarios desconfían que alguna persona que conocía la zona aprovechó un despiste para llevarse la mascota, y que probablemente tratará de venderla, por lo que hacen un llamamiento para que se informe a la Guardia Civil en caso de que se vea a alguien tratando de vender el ave.
Por parte de la familia, ayer mismo se dirigieron al cuartel de la Guardia Civil de Boiro para dar cuenta del hurto, pero tendrán que tramitar la denuncia hoy ante el Seprona.
La jaula es de color gris con los barrotes dorados, y tiene un candado.
Se está poniendo de moda lo de robar loros.
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