José Alonso / la voz 08 de noviembre de 2014
Anchoas, gambas peladas, bonito y almejas. «Unha pizza marinera de alta gama... coma el», dice sin reprimir una carcajada Gonzalo García Alonso, que anoche presentó en Ribadeo la pizza Nicolás, concebida -no lo oculta- como una operación de márketing para aprovechar el tirón de Francisco Nicolás Gómez Iglesias, el falso amigo del rey cuyas andanzas comenzaron a ser descubiertas a raíz de su visita en agosto a Ribadeo, donde se presentó en una reunión con un empresario asturiano como enlace entre la Casa Real y La Moncloa.
Que se aprovechase el tirón del pequeño Nicolás era cuestión de tiempo, y Gonzalo García Alonso ha sido el primero en hacerlo, en Tito&Pizza, un local de reciente apertura en Ribadeo. «Igual que sae a praia das Catedrais, que está en todo, pois tamén pode facelo Nicolás», comenta el hostelero sin perder la sonrisa. La pizza familiar, de 15 euros, es «de alto nivel, para ocasións. En plan cachondeo, certo, pero moi saborosa».
«Por suposto que é un gancho publicitario, aproveitando o tirón. ¿Fíxolle ben Nicolás a Ribadeo? Creo que si; mal non... total, que máis nos da», concluye. Gonzalo García proyecta abrir una cadena de franquicias. Quizás espera la ayuda de Francisco Nicolás.
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