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lunes, 9 de junio de 2014

El lago Ness, en versión española

Dos gallegos dan empleo en Escocia a once paisanos suyos con una exitosa iniciativa que ofrece visitas turísticas en español a Saint Andrews o a la capilla Rosslyn
Alfonso Andrade / VdG  9 de junio de 2014
La búsqueda del monstruo del lago Ness o la persecución de fantasmas por los cementerios de Edimburgo tienen ya en Escocia una versión en español gracias a la iniciativa de dos jóvenes gallegos. Vicente Figueroa (Mos, 1979) y Jaime Imbernón (Ribadavia, 1980) montaron hace cuatro años la compañía Viajar por Escocia. Con una furgoneta de segunda mano y una ilusión de primera reinterpretaban los misterios de la capilla Rosslyn (la de El código Da Vinci) para los turistas de habla hispana que llegaban al país. 
Cuatro años después son dueños de un pequeño imperio con dos autocares de 33 plazas, otros dos de 16, tres furgonetas de 9... «E aínda hai que coller máis buses en tempada alta, que non damos feito», precisa Vicente Figueroa. En el 2013 cerraron 32.000 rutas por el país y este año confían en llegar a 40.000. En cuanto al empleo, en verano tienen 40 trabajadores, que bajan a 15 en invierno.«Once deles son galegos, porque tamén queremos botar unha man á xente de alí. Por exemplo, os buses que traemos de reforzo no verán -comenta- veñen de Galicia, coma os choferes». Sale algo más barato y, sobre todo, «é xente con moita experiencia na estrada». 
Vicente, que es fruto de la precrisis migratoria («daquela aínda había traballo en Galicia»), llegó a Edimburgo en el 2006 con la intención de aprender inglés. Licenciado en Historia del Arte, trabajaba eventualmente como guía en el CGAC antes de marcharse, pero era de camarero «como sacaba realmente os cartos». 
Hijo, nieto y bisnieto de emigrantes, siempre quiso conocer mundo «polas historias marabillosas que escoitaba na casa», pero el detonante llegó tras un episodio «vergoñento» en el CGAC: «Un día chegou unha excursión de noruegueses, e das 50 ou 60 persoas que había no museo ninguén sabía inglés dabondo. Tiven que facer eu a visita como puiden e foi unha vergonza. Decidín marchar e aprender». 
Primeras 10.000 libras 
Llegó a Escocia para estudiar la lengua de Shakespeare, compartiendo piso con su socio, Jaime Imbernón, que es informático. Empezó a trabajar esporádicamente como guía para otras empresas, hasta que un día pasó algo inesperado. «Estaba nun bus con 50 persoas de España -relata- e preguntáronme que facía alí. Conteilles que quería aprender inglés e de seguida todos tiñan algún fillo ou neto que ía facer o mesmo e querían saber como». Vicente habló con su socio y entre los dos montaron en el 2008 una academia en la que ofrecían cursos de inglés para españoles. Esta primera iniciativa les funcionó bien, y con las 10.000 libras que ahorraron el segundo año decidieron comprar la furgoneta con la que se pasaron al sector turístico. 
¿Por qué cambiaron de negocio? En otro recodo del destino, Vicente se encontró un día con un pequeño grupo de argentinos que realizaban una ruta de ocho días por el país, pero el paquete no incluía la capilla Rosslyn, que les interesaba mucho. Le pidieron que los acompañase como guía porque no sabían inglés como para contratar uno local, pero Vicente declinó en principio la oferta porque no podía desatender sus tareas: «Pero despois de moito insistir e dos moitos cartos que me ofreceran, leveinos a Rosslyn e decateime de que había un negocio interesante no turismo». 
Este año, Viajar por Escocia tiene programadas ya once salidas de ocho días, «e so iso é mobilizar a 570 persoas». El lago Ness es sin duda el recorrido estrella, el que más demandan los clientes junto a otros clásicos como el lago Lomond o la isla de Skye. Muchos son mexicanos, argentinos y colombianos. También españoles, claro, aunque hay más andaluces o cántabros que gallegos. Los más sibaritas prefieren circuitos originales, como «o tour da música rock do país» o una semana «polas destilerías de whisky».

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