La Voz, 31/12/2018
ZOLTAN BALOGH | EFE |
Visitar la ciudad de los canales a partir de 2019 será un poco más caro. Y es que a los tradicionales costes de traslado habrá que añadir un nuevo impuesto que la ciudad ha implantado y entrará en vigor a partir del próximo verano. El objetivo es limitar el turismo de masas y la previsión es que suponga unos ingresos de hasta 50 millones de euros, según AFP.
Conocida como la tasa de desembarco, la medida fue aprobada el sábado e implicaría un precio de entre 2,50 o 10 euros, según la temporada, por turista. Esta tasa, que ya existe en las Islas Eolias o en Lampedusa, se aplicaría a todos los visitantes con independencia de si pernoctan o no. De hecho está dirigida especialmente a los visitantes que pasan un día y no pagan el impuesto por estancia, día y persona en los hoteles o a los propietarios de los alojamientos en alquiler.
Un ejemplo de ellos con los pasajeros de los casi 600 cruceros gigantes que hacen escala cada año en Venecia. En total, afectaría a más de 30 millones de personas al año, que son los turistas que recibe la ciudad de media. Conocida como la tasa de desembarco, la medida fue aprobada el sábado e implicaría un precio de entre 2,50 o 10 euros, según la temporada, por turista. Esta tasa, que ya existe en las Islas Eolias o en Lampedusa, se aplicaría a todos los visitantes con independencia de si pernoctan o no. De hecho está dirigida especialmente a los visitantes que pasan un día y no pagan el impuesto por estancia, día y persona en los hoteles o a los propietarios de los alojamientos en alquiler.
«Estudiaremos una reglamentación equilibrada y compartida que preserve a todos los que estudian y trabajan en nuestro territorio», declaró el alcalde de Venecia en Twitter, Luigi Brugnaro, de centroderecha.
Según el gobierno local, el destino de la recaudación sería mantener la limpieza en el centro histórico y sostener la seguridad especial que requiere el entorno.
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