Galicia refuerza su acción para eliminar ocho plagas asentadas desde hace años

El calor de los últimos meses ha adelantado la aparición de insectos defoliadores

R. R. García / LA VOZ, 03/06/2017

La primavera es tiempo de plagas. Especialmente de las propiciadas por insectos, en los que su ciclo vital se desarrolla cuando aumentan las temperaturas. Y este año fue anómalo en Galicia, con varios meses más calurosos de lo habitual. ¿Significa esto que se espera una mayor incidencia de las plagas en cultivos, árboles, plantas y frutales? No necesariamente. Es cierto que se ha detectado una aparición temprana de insectos como el pulgón, la mosca de la col o de distintos tipos de lepidópteros que atacan a las hojas, que hicieron su aparición incluso dos o tres meses antes de lo que le corresponde, pero esto no ha supuesto hasta el momento una mayor amenaza. «La situación no es distinta a la de otros años, aunque es complicado hacer un pronóstico, porque la situación puede cambiar en cualquier momento», explica Pedro Mansilla, jefe de servicio en la Estación Fitopalóxica do Areeiro, dependiente de la Diputación de Pontevedra.

En el diagnóstico coincide Elena Cartea, directora de la Misión Biológica de Galicia (CSIC). «Es muy difícil decir a estas alturas si este año la repercusión de las plagas será mayor o no», asegura. Y la Consellería de Medio Rural asiente: «Non necesariamente -advierte-, a maior temperatura, maior incidencia».

Pero si en las plagas de temporada, de momento, no se advierte mayor problema, no ocurre lo mismo con las denominadas de cuarentena, que obligan a la Administración, por normativa europea y nacional, a establecer medidas concretas para su erradicación. La Consellería de Medio Rural ha activado planes específicos para combatir siete invasiones de este tipo, a la que ha añadido uno más para atacar, mediante lucha biológica, a la avispilla del castaño, dada la importancia económica que este árbol tiene en Galicia. Las otras siete actuaciones se están llevando a cabo contra el nematodo del pino, el chancro bacteriano del kiwi, la psílido africana de los cítricos, la pulguilla de las patatas, la couza guatemalteca de la patata, el picudo rojo de las palmeras y el chancro del pino.

Depredadores naturales

Unas tienen más incidencia que otras en Galicia, pero de lo que se trata a toda costa es evitar su expansión. La avispilla del castaño, por ejemplo, ya afecta a 176 municipios gallegos, el 56 % del total. «A progresión da avespiña está sendo peor do que esperabamos. Sabemos que van vir uns anos malos», se lamenta Jesús Quintá, presidente de la presidente de la IXP Castaña de Galicia, que pide sueltas masivas del depredador del insecto.

Más de 30.000 árboles talados para frenar el nematodo del pino

El nematodo de la madera del pino (Bursaphelenchus xylophilus) es la auténtica pesadilla para los propietarios de montes. Causada por un insecto, el Monochamus galloprovincialis, en pocas semanas causa la muerte de los árboles. Entró en Europa en 1999 por Portugal, donde se ha extendido por el país, y en el 2010 se detectó en Galicia, en el concello pontevedrés de As Neves. Seis años después se localizó en Salvaterra do Miño, «sen que haxa constancia dunha maior extensión no territorio galego», según Medio Rural. Mantenerla confinada es la prioridad, dada su peligrosidad. En esta estrategia la Xunta ya ha invertido diez millones de euros.

«Nun primeiro momento daquel foco inicial -explican fuentes de Medio Rural- foi obrigatoria a curta de todas ás árbores da familia dos piñeiros nun radio de 1,5 kilómetros ao redor da árbore detectada como positivo, o que supuxo un inxente traballo de curta nun tempo récord». Desde entonces se talaron 31.447 unidades en 1.426 parcelas.

Incumplimientos

Pese a esta y otras acciones, una auditoría de la UE detectó «incumplimientos recurrentes» en el protocolo de lucha contra la plaga. Una de las quejas se refiere a la tardanza en la eliminación de los pies muertos, que deben retirarse antes del 1 de abril de cada año. El departamento de la Xunta alega que «desde o 1 e xaneiro comezouse a traballar para corrixir certos aspectos sobre os que se nos chamaba a atención» y defiende que «as sucesivas inspeccións comunitarias constataron a existencia dunha organización clara dos controis en relación co nematodo e unha boa cooperación e comunicación entre as organizacións involucradas».

Alerta en los viñedos ante las condiciones propicias para el mildiu

Las condiciones climáticas de esta semana son favorables para las infeciones. Es el aviso que acaba de lanzar la Estación Fitopatolóxica do Areeiro, en el que pone en alerta a los viticultores ante el mayor riesgo de plagas bien conocidas como el mildiu o el oidio. Pero, pese a esta situación propicia, en ninguna de las denominaciones de origen de Galicia se han detectado problemas debido a la acción de estos hongos patógenos para la vid.

Lo que sí han hecho, como en Monterrei, es empezar a aplicar tratamientos fitosanitarios como medida preventiva. En esta demarcación, al igual que en O Ribeiro y Valdeorras, preocupa más cómo recuperarse del devastador efecto de las heladas tardías de finales de abril, que en Valdeorras afectaron al 60 % de la cosecha. Esta situación de debilidad «puede ser un caldo de cultivo para la proliferación de dolencias y afecciones como el mildiu», explican desde la denominación. En O Ribeiro también preocupa cómo el calor excesivo y la poca lluvia afecta a la hidratación de las cepas.

Por ahora las plagas de la vid no han aparecido, pero pueden hacerlo. «En Galicia, debido a las condiciones climáticas de la zona, con primaveras de temperaturas suaves, alta humedad y lluvias se producen siempre ataques de mildiu de mayor o menor gravedad», constata Carmen Martínez, directora del Grupo de Viticultura en la Misión Biológica de Galicia, que trabaja en modelos de predicción de estas enfermedades adaptados a cada zona vitícola.

En Rías Baixas también están tranquilos. «O mildiu é un vello coñecido dos viticultores e están todos previdos», asegura Alberto Barral, director técnico de Condes de Albarei. Sostiene que, de momento, no hay plagas, pues la mayoría de los viñedos no presentan síntomas, pero sí que reconoce que se están dando las condiciones adecuadas para que se reproduzcan. La misma opinión comparten en Martin Códax. Su director técnico, Miguel Tubío, apunta que «esta primavera tan cálida pode cambiar o perfil da colleita, pois teremos viños con máis grao e menos acidez». El mayor problema que ven en esta bodega es la sequía, pues la tierra se ha quedado sin reservas para afrontar el verano. En Paco & Lola, la tercera cooperativa de esta denominación, dicen que sus viticultores están «en alerta máxima». «Nestes días con brétema poden complicarse as cousas», dice Diego García, su responsable técnico.